16 de mayo de 2019 | @BMComovamos
La mesa directiva del Concejo de Bucaramanga está conformada por Nelson Mantilla Blanco (izquierda), Wilson Mora Cadena (centro) y Uriel Ortiz Ruiz. (Foto: Concejo de Bucaramanga)
Por Yany León Castañeda
Dentro del balance de las cincuenta sesiones del periodo ordinario que se cumplieron durante los meses de marzo y abril en el Concejo de Bucaramanga, su mesa directiva, de veinticuatro debates de control político que habían sido propuestos y aprobados por los diferentes partidos para ser llevados a plenaria solo agendó cuatro.
La mesa directiva prefirió la presentación de veintinueve informes de gestión en una dinámica que trata muchos temas, pero sin la posibilidad de profundizar. Los debates de control político son la principal herramienta de los concejales y los partidos políticos para hacer seguimiento a la gestión de la administración en temas específicos. Y se caracterizan por:
- Ser propuestos por un partido político con representación en el Concejo, no solo por la mesa directiva.
- Los concejales envían unas preguntas específicas de una problemática a los funcionarios citados.
- Previamente, el concejo recibe las respuestas del cuestionario enviado, lo cual permite preparar su intervención en la sesión.
- Y por último, deben darse conclusiones de la sesión.
Esto permite analizar los problemas de la ciudad con mayor profundidad desde un punto de vista más integral, puesto que se cita a los funcionarios de las diferentes dependencias responsables de darles solución. Es su prerrogativa no incluir en la agenda todos los temas de interés de los demás concejales, pero definitivamente parece no ser muy democrático.
Publicado en ADN Bucaramanga